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17 febrero, 2010

Las Ecorregiones Europeas

Las ecorregiones europeas son diversas debido a la influencia de los climas y la dimensión longitudinal y latitudinal de la región. Las ecorregiones europeas son:

Tundra
Las características primarias de esta región son temperaturas bajas (entre -15ºC y 5ºC) y gran brevedad de la estación favorable. La precipitación pluvial es más bien escasa (unos 300 mm al año), pero el agua no suele ser factor limitante, ya que el ritmo de evaporación es también muy bajo.
El terreno esta casi siempre congelado, excepto en los 10 ó 20 cm superiores que experimentan deshielo durante la brevísima temporada calurosa. El clima tan frío de este bioma da lugar al permafrots, que es una capa de hielo congelada que permite únicamente el crecimiento de plantas en los días de verano ya que se descongela su superficie. Existe una tundra ártica, también llamada "desierto polar", que se extiende por encima de los 60º de latitud N
Vegetación: Líquenes, algas y musgos.
Fauna: En la época de deshielo, insectos. Aves migratorias, reno, lobo, zorro ártico, lemming .

El bosque caducifolio y el bosque mediterráneo

Cuando las temperaturas son más templadas y la humedad más abundante y repartida a lo largo del año, el bosque de confieras es sustituido por el bosque caducifolio. En el Hemisferio Norte este bioma está dominado por
hayas, robles, avellanos, olmos, castaños y numerosos arbustos que generan un suelo profundo y fértil. En las zonas templadas, si la pluviosidad es baja y la estación seca muy marcada, se instala otro tipo de bosque, de hoja perenne y resistente a la sequía estival. Es el bosque mediterráneo, con vegetación xerófila, dominado en Europa por la encina, el alcornoque o el roble quejigo. Hay mucha vegetación y está poblado por varios animales.
Clima de bosque caducifolio: Encontramos el bosque caducifolio en torno a los 40º 55º de latitud . El clima típico tiene un régimen térmico moderado, precipitaciones abundantes, y bien distribuidas a lo largo del año y 4 estaciones bien definidas. En el predominan los suelos pardos poco o nada lixiviados y con humus mull o moder (degradación del bosque a la pradera alpina ). En las pendientes aparecen suelos ranker o rendzina, más o menos ácidos, causados por la erosión sobre roca madre carbonatada.
Vegetación: predominan las especies leñosas caducifolias: roble, haya, encina y carpe. Tiene un sotobosque abundante y en primavera crecen heliofilas (plantas que dependen del viento para reproducirse).
Fauna: esta determinada por la hibernación y la emigración ; es muy variada: Batracios, reptiles, roedores, insectos del humus, herbivoros ( ciervo) y aves migratorias y aves nocturnas / rapaces. Otros de los carnívoros son: tejones, zorros, lobos ...etc.



Pradera
El bioma de la pradera se encuentra en parajes con lluvia de 300 a 1500 mm por año, cifra insuficiente para el sustento de un bosque, y superior a la normal en un desierto verdadero. Se encuentra terreno de prado en el interior del continente. El suelo de las praderas es muy rico en capas por virtud del rápido crecimiento y descomposición de los vegetales, y muy apropiado para el crecimiento de plantas alimenticias como
trigo y maíz. Otras de sus características pueden ser:
Clima: La medida anual está entre los 20 a 29 ºC, con una época de lluvia y otra de sequía. De acuerdo con Köppen pertenece a los tipos Aw, BS y Cw.
Suelo: Generalmente es pedregoso aunque puede haber otras variedades; se encuentra en las laderas de montañas.
Vegetación: Los árboles están colocados en un solo estrato; las hojas de muchas especies son amarillentas o verde claro, también hay plantas espinosas como los cactos.
Entre los árboles destacan: el copal, el pochote, el palo de arco, el palo tolote, entre otros. Además hay hierbas y algunos matorrales.
Fauna: Existen aves, reptiles y pequeños mamíferos, como liebre, rata almizclera, venado cola blanca, coyote, y ocasionalmente puma y jaguar.

Chaparral

En las regiones del mundo de clima dócil, con lluvias relativamente abundantes en invierno pero con veranos muy secos, la comunidad culminante incluye árboles y arbustos de hojas gruesas y duras. Este tipo de vegetación se llama "xerófila" Durante los veranos secos y calurosos es constante el peligro de fuego que puede invadir rápidamente los lomeríos del chaparral.
En el Mediterráneo, aunque la diversidad animal residente no es grande, la de aves migratorias es muy grande ya que esta región queda a mitad del camino entre los trópicos y las zonas más templadas. Durante el verano, la población de aves es menor, encontrándose solamente algunas aves tropicales, adaptadas al hábitat arbustivo y a condiciones de aridez. Llegan al Mediterráneo en primavera para nidificar, abandonándolo antes del comienzo del invierno. Entre los visitantes invernales, predominan las paseriformes (tales como las currucas y zorzales) y los patos.

Desierto
Se denota en regiones con menos de 300 mm de precipitación por año, o en zonas cálidas, con lluvias más copiosas pero con distribución no uniforme durante el ciclo semanal. La escasa precipitación pluvial puede ser debida a presión barométrica alta persistente o, a una posición geográfica al abrigo de la lluvia en una montaña; o a grandes altitudes, como en las regiones desérticas de
España. Los únicos desiertos absolutamente libres de lluvia son los del norte de Finlandia.
Vegetación: Es muy densa y consta de arbustos quenopodiáceos,
artemisas y cactus.
Fauna: Poca variedad de reptiles.

Taiga
Ocupa una franja de más de 1500km de anchura en el hemisferio norte y también se encuentra en zonas montañosas. Temperaturas invernales muy bajas (menos de -40ºC) y un verano relativamente corto. Escasez de agua (250mm-500mm anuales) y además permanece helada muchos meses.
Vegetación: Está formado por coníferas (pinos, abetos, chopos...), con troncos rectos y cubiertos por resina y hojas pequeñas semejantes a agujas.
Fauna: Son pocos los animales que permanecen en la taiga, la mayoría emigra en otoño hacia latitudes más bajas.

Estepa
La estepa es un bioma que comprende un territorio llano y extenso, de vegetación herbácea, propio de climas extremos y escasas precipitaciones. También se lo asocia a un desierto frío para establecer una diferencia con los desiertos tórridos. Estas regiones se encuentran lejos del mar, con clima árido continental, una gran amplitud térmica entre verano e invierno y precipitaciones que no llegan a los 500 mm anuales. Predominan las hierbas bajas y matorrales. El suelo contiene muchos minerales y poca materia orgánica; también hay zonas de la estepa con un alto contenido en óxido de hierro lo que le otorga una tonalidad rojiza a la tierra.
Tiene un clima seco (semiárido). Temperaturas elevadas en verano y bajas en invierno, lo que da lugar a una gran amplitud térmica como antes se dijo. Las lluvias oscilan entre 250 y 500 mm anuales presentándose:
Fauna: Grulla damisela - Hámster - Marmota bobak - Spalax menorVegetación: es del tipo xerófila, es decir, plantas adaptadas a la escasez de agua, con raíces profundas en la parte inferior que buscan las napas de agua. Entre las plantas están las siguientes: Ajenjo negro, espiguilla azul, gagea, hierba crestada, juncia y ranúnculo

Alud en Italia

Tragedia en un camping del sur del país
Italia: un gigantesco alud dejó por lo menos 10 muertos en Calabria
Otras doce personas permanecen desaparecidas tras desbordarse el cauce de un río.
La mayoría de las víctimas eran discapacitados que estaban de vacaciones
Las torrenciales lluvias provocaron la avalancha de barro y agua
Continúan las tareas de rescate



Los autos del camping de Le Giare quedaron apilados luego del trágico alud Foto: AP
SOVERATO, Italia (ANSA).


Diez personas murieron y otras doce desaparecieron bajo una gigantesco alud de barro de tres metros de altura al desbordarse un río como consecuencia de las lluvias torrenciales que desde hace tres días azotaron la región de Calabria, en el sur de Italia.
Las intensas precipitaciones provocaron la salida de cauce del río Beltrame en la localidad de Soverato, que arrasó con un campamento de minusválidos, provocando diez muertes; por lo menos doce personas continuaban hasta el momento desaparecidas.
Las fortísimas precipitaciones convirtieron el río Beltrame en una masa de agua y barro que sepultó las carpas instaladas en el camping Le Giare, junto a la ribera, donde un grupo de cincuenta personas, 17 discapacitados y 30 voluntarios ayudantes pasaban unos días de veraneo.
"Una ola de barro y agua arrasó todo -dijo un corresponsal de la televisión italiana-. El camping ya prácticamente no existe."
El río se desbordó aproximadamente a las cinco de la madrugada, pero los primeros socorristas, alertados por algunos veraneantes que lograron ponerse a salvo, pudieron entrar en la zona afectada sólo dos horas después, a causa de la fuerza del agua.
La tremenda marea de barro convirtió toda la zona del camping en un escenario desolador, con árboles arrancados de cuajo, bungalows reducidos a tablas de madera, casas rodantes lanzadas contra los árboles, todo sepultado bajo una capa de barro de tres metros de altura.
A lo largo del día fueron encontrados los cadáveres de diez personas, pero los equipos de socorro temen que el impetuoso cauce del río, que desemboca en el mar a sólo un kilómetro de distancia, haya arrastrado consigo más víctimas. Los fallecidos
De las muertes confirmadas, seis correspondían a discapacitados y una a un joven que fue arrastrado por el agua cuando ayudaba a su padre a refugiarse. Del resto no se dio mayor información. Una veintena de víctimas fue internada.
En las operaciones de rescate participan 300 agentes de la policía, carabineros, bomberos, miembros de la protección civil y de la Cruz Roja.
Olas de hasta siete metros de alto aumentaban ayer el pánico en Soverato, una de las localidades más concurridas de la costa calabresa que por su belleza se conoce como "la perla del mar Jónico".
Las fuertes lluvias habían inducido a los organizadores del camping a acortar su estada y la partida había sido prevista para ayer.
Mientras se trabajaba incesantemente para localizar a los desaparecidos, no cesaba la alarma en toda la provincia de Catanzaro, donde las redes ferroviarias y las autopistas fueron interrumpidas a causa del peligro de desmoronamientos. Muchas pequeñas localidades quedaron aisladas.
En la misma zona, hace treinta años, un río de agua y fango sepultó para siempre San Luca de Aspromonte y otras dos localidades, Nardodipace y Fabrizia, ubicadas en sierras cercanas.
Agencias EFE y DPA

15 febrero, 2010

Riesgos Climaticos

La diversidad de tiempos y climas que presenta el territorio europeo impone una gran variedad de riesgos climáticos. Sin olvidar el mayor impacto económico y territorial vinculado a otros riesgos naturales (volcanes y terremotos), que tienen en los países de la orla mediterránea las áreas de mayor peligrosidad. Los riesgos climáticos que afectan a los países europeos son:
* Lluvias abundantes y continuadas que causan desbordamiento de grandes colectores fluviales.
Las inundaciones de los colectores europeos son el riesgo de causa atmosférica más importante en Europa. Conviven dos realidades, los desbordamientos masivos de los grandes ríos (Rin, Mosa, Danubio, Oder, Vístula, Neisse, ríos rusos), causados por lluvias abundantes y continuadas o deshielos rápidos y, por otro lado, las avenidas de los ríos mediterráneos debidas a lluvias intensas y torrenciales en escaso intervalo de tiempo. Entre los primeros destacan los desbordamientos del Rin, Mosa y Sena en diciembre de 1993, inundación de las zonas ribereñas de Alemania, Holanda, Bélgica y Francia, la más importante de enero de 1995, en este mismo sector, que provocó lo evacuación de 250.000 personas, 25 muertos y daños evaluados en 3.000 millones de dólares . En julio de 1997, una sucesión de jornadas de tiempo inestable en Europa oriental causó la crecida desmesurada y desbordamiento de los ríos Vístula, Oder y Neisse, provocando unas graves pérdidas económicas y la evacuación de miles de personas en el suroeste de Polonia, República Checa y la frontera oriental alemana. En total, cerca de 80 muertos y 192.000 evacuados. La compañía Munich Re evaluó las pérdidas en 5.000 millones de dólares.
* Lluvias torrenciales que provocan avenidas de ríos y ramblas.
En los paises mediterráneos europeos los episodios de lluvia intensa otoñal provocan los desbordamientos de ríos, rieras y barrancos. Su origen se relaciona con la existencia de una orla montañosa terciaria que confiere carácter de
cubeta rodeada de relieves al sector occidental del Mediterráneo, la intensa ocupación de llanuras litorales, y la presencia, en esa época del año, de aguas marinas cálidas, premisa indispensable para la formación de grandes conjuntos conectivos. De manera que las situaciones de inestabilidad atmosférica se saldan con registros de precipitación abundantes y de elevada intensidad horaria, y la crecida, a veces desaforada, de ríos y barrancos. La localidad de Jávea (España) ostenta el récord europeo de precipitación máxima en 24 h: 871 mm, el 2 de octubre de 1957. Destacan las inundaciones de septiembre de 1963 en Cataluña, de octubre de 1982 en Valencia y Alicante, o las de septiembre de 1992 en el sur de Francia Durante esta última se contabilizaron 63 muertos en las regiones de Voucluse, Ardiche y La Dame.
Las prácticas de defensa llevadas a cabo para evitar inundaciones, amén de las mejoras en la
predicción meteorológica, contemplan medidas estructurales de regulación de caudales (diques y embalses), canalizaciones de tramos conflictivos e instalación de sistemas de alerta automática basados en la implantación de puntos de control que envían información en tiempo real, como los desarrollados, en los últimos años, en Francia (red Cristal), España (SAIH: o el Sistema Eficaz de Aviso de Emergencia (DAEWS) en el Danubio. Sobresale también la serie de obras llevadas a cabo en Holanda para evitar las inundaciones, que culminan con la puesta en marcha del Plan Delta, aprobado tras el desastre de febrero de 1953 que causó 1.865 muertos y la inundación de más de 160.000 ha. Este plan tenia por objeto la ejecución de una serie de infraestructuras para la prevención de los desbordamientos del Rin, Escalda y Mosa.

Sequías
Las sequías en Europa tienen su área de mayor riesgo en los países mediterráneos, debido a la mayor frecuencia que presentan, algunos años, las situaciones atmosféricas de dorsal subtropical que imponen condiciones de estabilidad absoluta con penuria de precipitaciones. Los volúmenes de lluvia de los años secos no alcanzan, en ocasiones, el 50 %de la media.
Grecia, el sur de Italia y, sobre todo, la Península Ibérica, son las áreas europeas más afectadas por este riesgo, que causa graves daños en la agricultura y problemas de abastecimiento público de agua. Destacan las secuencias secas desarrolladas entre 1981-1984 y 1992-1995. Esta última causó unas pérdidas económicas en el campo español superiores a 500.000 millones de pesetas. No faltan, sin embargo, episodios de sequía en las regiones europeas de clima oceánico, cuyos efectos no dejan de ser gravosos, puesto que afectan a áreas poco acostumbrados o este tipo de episodios. Así, la sequía padecida en algunos países de Europa occidental entre 1975 y 1976 causó unas graves pérdidas en el sector agrícola y obligó o practicar restricciones en el suministro de agua de 17 horas al día en el sur de Inglaterra. Similares efectos tuvo la secuencia de sequías de 1989-1991 en el Reino Unido, que se saldó con daños superiores a mil millones de libras esterlinas; 1989 fue el más seco de los últimos veinticinco años en Inglaterra; asimismo, en los agricultores de Alemania, Polonia, Checoslovaquia, Hungríay regiones atlánticas de Francia, se registraron pérdidas elevadas.
Temporales de viento.
Un riesgo climático poco valorado, pero de elevada frecuencia en los países europeos de latitudes más septentrionales, durante los meses de noviembre a abril, es el de los «temporales de viento fuerte», ocasionados por
borrascas atlánticas profundas o «ciclones explosivos» formados en la cuenca ártica. La violencia de los vientos que acompañan estas formaciones meteorológicas, con rachas máximas que superan los 100 km/h, causan daños en infraestructuras, viviendas y cultivos bajo plástico. Destaca la sucesión de cuatro temporales de viento que sacudió el noroeste de Europa (Gran Bretaña, Irlanda, Alemania, Suecia, Francia, Dinamarca y Holanda),entre finales de enero y principios de marzo de 1990, que elevó los pérdidas económicos por encima de 10.400 millones de dólares.
Temporales de
frío y nieve.

Las «olas de frío» provocan, anualmente, unas elevadas pérdidas humanas en Rusia y en los países de Europa oriental (Polonia, Repúblicas bálticas, Bielorrusia, Ucrania, Eslovaquia, Hungría). La llegada de masas de aire árticas o siberianas hacen caer los registros de temperatura mínima a valores de -15 °C e inferiores. Muy graves daños económicos para la actividad agraria causan las expansiones de estas masas de aire que alcanzan los países mediterráneos (Grecia, Croacia, Serbia-Montenegro, Bosnia-Herzegovina, Albania, Macedonia, Italia litoral mediterráneo de Francia y España. En estos casos, las regiones poco acostumbrados a bajas temperaturas invernales ven perderse las cosechas de frutales y productos hortícolas que se encuentran en producción en esas fechas. Entre los episodios de frío intenso de los últimos decenios en Europa destacan las invasiones frías de mediados de febrero de 1956, navidades de 1970-1971 y 1996-1997, y en la primera quincena de enero de 1985. La ola de frío de enero de 1985 ocasionó cuantiosos daños en los cultivos de la Alemania, Suiza, Austria, Francia y España. Unos efectos catastróficos tuvo la «invasión siberiana» ocurrida en las navidades de 1996-1997, con registros térmicos mínimos de -30 °C y menos en Moscú y otras capitales del este de Europa, con cerca de cuatrocientos muertos.
Relacionado con precipitaciones de nieve en zonas de montaña se encuentra el riesgo de
avalanchas de nieve o aludes. Los aludes se producen con precipitaciones de nieve abundantes caídas en breve intervalo. No obstante, el riesgo de aludes, además de la abundancia de nieve, depende, en gran medida, de las condiciones topográficas del área afectada; y, junto a ello, una vez que la masa de nieve está presta para desprenderse, la temperatura ambiente y el viento son los factores desencadenantes de su derrumbamiento. La orla montañosa alpina es el área más afectada por estos destacados eventos, sobresaliendo la avalancha de 1919 en el Tirol austríaco, que causó la muerte de 10.000 personas, y la de Blons, en 1954, también en Austria, con 380 muertos. Más recientes son las avalanchas de Saas-Fee (Suiza) que causó 88 muertos en 1962, la de Val-d'Isère (40 muertos, en 1970) o las ocurridas entre febrero y abril de 1999 en Francia (Chamonix) y diversos valles de los Alpes austríacos con más de 30 muertos.
Olas de calor.
En sentido totalmente contrario, los países del
sur de Europa se ven azotados en verano por expansiones de la masa de aire sahariano, que, en los meses centrales del verano, provocan unos incrementos súbitos de temperaturas, un descenso de la humedad relativa y sequedad ambiental, que se suelen acompañar de incendios forestales intencionados y de afecciones cardiorrespiratorias en las áreas afectadas. En ocasiones, la intensidad de las expansiones alcanza a países tan alejados de la fuente norteafricana como Gran Bretaña o los países nórdicos. Destacan, en este ámbito, las olas de calor muy intensas de junio de 1983 (44 muertos en Grecia y 40 en el sur de Italia) y de julio de 1994 en la Península Ibérica (46,1 °C en Murcia), que causó 41 muertos.

Tormentas de granizo
Por último, hay que mencionar los daños en los cultivos provocados por las tormentas de
granizo que descargan entre los meses de junio y septiembre en algunas regiones de Europa. Las áreas de mayor frecuencia de aparición de estos episodios son las regiones caucásicas de la antigua URSS (en particular la república de Georgia), Ucrania y centro de Rusia, en torno a Moscú, suroeste de Polonia —Wroclow—, República Checa, el norte de Italia (llanura del Po), sur de Francia, Suiza, Austria, landers del sur de Alemania y litoral mediterráneo y el valle del Ebro en España. En estas áreas se han llevado a cabo o lo largo del presente siglo, y aún se practican, actuaciones de defensa frente a los granizos (cohetes, siembra con yoduro de plata y mallas de plástico sobre los cultivos).

El Clima de Europa



El clima europeo está determinado por la posición de Europa en el globo, entre las latitudes medias y altas del norte y en la fachada occidental del continente eurasiático. Le afectan las masas de aire polar marítimo y polar continental, pero también las masas de aire tropical marítimo, y sólo en ocasiones tropical continental. La constante presencia de masas de aire marítimo hace del europeo un clima estable y agradable.
El territorio está dentro de los centros de acción de: el frente polar, que a través de la borrasca de Islandia y la corriente en chorro canaliza las masas de aire polar marítimo que llegan a Europa; el anticiclón siberiano que se instala en inviernosobre Siberia y canaliza las masas de aire polar continental, y el anticiclón de las Azores que canaliza las masas de aire tropical marítimo. Estos son los centros de acción principales, pero también hay algunos secundarios y estacionales, que canalizan masas de aire ártico o tropical continental.
En las regiones centrales aparecen anticiclones térmicos en invierno, así como en ciertas regiones del Mediterráneo. En otras, como el mar de Liguria, en otoño aparecen borrascas convectivas. En muchas regiones, como en España, el relieve tiene una importancia decisiva en la definición del clima que, sin modificar los valores típicos del clima zonal, lo hacen mucho más extremo, otorgándole un alto grado de continentalidad.
Cuatro son los climas más importantes en Europa: el clima mediterráneo, el clima marítimo de la costa oeste, el clima seco de las latitudes medias, y el clima continental húmedo, pero también encontramos, en regiones del norte, el clima de los bosques boreales y el clima de tundra. Pero en Europa es de especial importancia el clima de montaña.
Corrientes Marinas
EL CLIMA MEDITERRÁNEO: Las masas de aire polar marítimo que afecta a estas zonas en primavera, otoño e invierno son las responsables de la mayor parte de las precipitaciones en este clima.Las temperaturas son suaves, ya que durante el año apenas varían unos 15ºC.
EL CLIMA OCEÁNICO: Es un clima que comprende las orillas del oceáno Atlántico y va desde Noruega hasta la costa norte portuguesa. Hacia el interior del continente, el clima oceánico va desapareciendo y se convierte en el clima continental. Las precipitaciones también disminuyen del este. Las temperaturas moderadas sin grandes oscilaciones.
Bosque Mixto caducifolio
CLIMA CONTINENTAL: Se caracteriza por el contrastre en las precipitaciones y altas temperaturas del verano, y el frío seco del invierno. Las altas temperaturas del verano hace que la evaporación del agua caiga en forma de chaparrones.
CLIMA DE MONTAÑA: En el clima de montaña la temperatura disminuye de 0,5ºC a 1ºC con cada 100m de altura, aumenta la humedad relativa del aire y provoca precipitaciones.
Imagen satelital de la Peninsula Escandinava.
CLIMA SUBÁRTICO: Es un clima que se encuentra entre los 50º y los 70º grados de latitud, sobre todo de latitud norte, ya que en el hemisferio sur apenas lo encontramos en algunas islas.

10 febrero, 2010

El Relieve de Europa

El relieve de Europa no es excesivamente complejo, básicamente se organiza en torno a una gran llanura central rodeada de regiones montañosas
Sin embargo, aunque la llanura es lo dominante (el 66% del territorio no supera los 200 metros de altitud) la influencia de las montañas es notable.
La combinación de montaña y llanura da al territorio una variedad ecológica muy valiosa, lo que ha permitido explotar gran cantidad de recursos. En Europa las montañas no han constituido obstáculos insalvables, más bien lo contrario, son regiones de contacto. Las mayores elevaciones son: Elbrus (5.633 m), Mont Blanc (4.807 m) y Mulhacén (3.478 m). Pero el rasgo más destacado del relieve europeo es la constante presencia del mar, gracias a lo recortado de sus costas. Europa tiene más de 43.000 km de costas; y ninguno de sus puntos se aleja tanto del mar como para no recibir su influencia, aunque la orografía tenga mucho que decir en ello. Esto permite la entrada de las masas de aire marinas mucho menos contrastadas que las continentales